Así, sí. No sé si ha sido por las estrellas invitadas, porque Sheldon ha tenido menos protagonismo, porque Raj ha sido él (no el engendro machista que a veces se pasa cuando bebe demasiado), porque no hemos visto a Amy Farrah Fowler o porque Howard es muy grande. Quizás haya sido un poco de todo. El caso es que hoy sí que me lo he pasado muy bien. ¿Estáis de acuerdo? ¡Vamos a comentarlo!
Recuperamos la dinámica de utilizar dos tramas principales. Y no, esta vez no todo ha girado en torno a Sheldon. Si hay un protagonista que se pueda destacar en este episodio, sin duda ha sido Howard. Me he quejado en más de una ocasión de la falta de continuidad de las tramas de esta serie, y el ejemplo de Bernadette era uno de los más claros: la pareja rompió y ni siquiera tuvimos la oportunidad de verlo. Simplemente lo mencionaron de pasada y poco más. Por eso hoy agradezco en el alma que hayamos recuperado ese tema: merecíamos saber el motivo de la ruptura.
Todo ha surgido a raíz del reencuentro casual de Howard y Bernadette en The Cheesecake Factory. Vale, de acuerdo, he sido demasiado benévola con Howard: yo no llamaría "encuentro casual" al hecho de esconderse bajo la mesa para evitar ser visto. Pero allá cada uno con sus métodos. Total, para lo que le ha servido...
No te hagas el interesante: sabemos lo que harás después
Como era de esperar, el hecho de volver a ver a Bernadette ha hecho mella en Wolowitz, destrozándole una de sus fantasías íntimas. La verdad es que la escena ha sido enorme, comenzando por la simple decoración del dormitorio. Y ha ido en aumento... Primero, con la aparición de Katee Sackhoff ¡con traje de piloto! Luego con la intromisión de la propia Bernadette. Y, finalmente, con el gran George Takei, poniendo en duda la sexualidad de Howard. Todo esto, claro está, sazonado con las voces de la madre de fondo. Pero no lo puedo evitar: lo que más me ha gustado ha sido la conversación entre las dos estrellas de la ciencia ficción acerca del encasillamiento: It’s frakking frustating! ¡Te adoramos, Starbuck!
Por otro lado, las dudas de Howard nos han llevado a conocer la verdad acerca de su ruptura con Bernadette: la infidelidad. Pero no una infidelidad cualquiera. No, Howard se enrolló con Glissinda the Troll en World of Warcraft. ¡Y es que nadie se puede resistir a Wolowizard! Ni siquiera un conserje cincuentón de universidad...
El caso es que, al final, la ex-pareja ha hecho las paces. Por supuesto, el mérito de la escena se lo lleva Penny, que ha hecho lo inimaginable para no perder detalle de la conversación. Así que, visto lo visto, parece que vamos a volver a tener a Bernadette de vuelta por la serie. Seguramente nos enteraremos cuando ambos decidan llevar la relación un paso más adelante. ¿No sería genial ver a Starbuck tomando la revancha ante Takei?
Te lo dije...
Lo bueno es que la otra trama también ha mantenido un gran nivel. Y es que juntar a Sheldon y a Raj en el trabajo siempre resulta genial. Jamás olvidaré cierta escena con Eye of the Tiger de fondo... El caso es que esta semana ha vuelto a haber discusión, esta vez debido a que el indio quería tener su propia mesa en el despacho de Sheldon.
Ha sido divertido ver cómo Cooper se quedaba sin argumentos ante la idea de que Raj comprara su propia mesa, y ha terminado con ese "Because... it’s my office" en plan niño pequeño. ¡Me encanta cuando Sheldon no sabe qué responder! Y eso ocurre en contadas ocasiones...
Pero claro, una vez que Raj ha visto la oportunidad de molestar a su compañero, la ha aprovechado al máximo. ¿Cómo habrá podido encontrar una mesa tan Brobdingnaniana? (Todos los días se aprenden palabras nuevas, ¿eh?) Por suerte, como hombres centrados que son, han decidido resolver sus diferencias de la forma más madura posible:
Así...
De esa escena me quedo con el gag de Raj y su odio hacia la India: para tratar de echarle del despacho, Sheldon utiliza música hindú. Y lo que es peor: luego es el propio Raj el que cuenta que, después de haber vivido allí, es capaz de soportar cualquier olor: "Crecí en la India. Todo un subcontinente en el que las vacas caminan por la calle y nadie ha tenido jamás un movimiento intestinal sólido." ¡Divertidísimo Koothrappali!
En resumen, con The Hot Troll Deviation me lo he pasado nucho mejor que la semana anterior. Creo que es bueno repartir el peso entre más personajes. Y, aunque Leonard ha estado prácticamente desaparecido, nadie ha tenido más protagonismo del debido. Terminamos, pues, con mi particular Top Three de mejores momentos del episodio:
•En tercer lugar, la respuesta de Raj cuando Sheldon le dice que si su mesa no le parece desproporcionada para su finalidad: "Teniendo en cuenta que su finalidad era molestarte, creo que ha dado en el clavo."
•En segundo lugar, me quedo con Penny tratando de no perderse un único detalle de la conversación entre Howard y Bernadette: "Parecéis sedientos, así que he traído té. Es fruta de la pasión, novedad en el menú" "Lo sé, trabajo aquí" "Oh, tienes razón... Así que, Horward: Trolls: ¿Sí o no?"
•Pero, sin duda alguna, lo que más gracia me ha hecho del episodio ha sido la conversación entre Sackhoff y Takei acerca del encasillamiento. Una vez más: It’s frakking frustrating! ¡Cómo echo de menos Galactica!
No hay comentarios:
Publicar un comentario